Sin olvidar mis deseos de buena vida, las arrugas no hay que maltratarlas. Hay que cuidarlas cuando se presentan, atenderlas, tienen derecho y lo necesitan. Con ello lograrás que el desagravio general pase a su derecho de vida. Son humanas, buenas y merecen respeto.
No olvidemos que todas ellas son de igual color. Valen más que el oro.
Sinceramente,
Joan Ordaz Bonet
Joan Ordaz Bonet
1 comentario:
Molt bé iaio!! Ja són més de 10 anys escrivint cartes de diferents temàtiques. Segueix així i no canviis mai.
Una abraçada molt gran.
Oscar
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